Estas navidades, durante las últimas compras, estando en la fila de la caja para pagar, tomamos una decisión que nos ha traído un pequeño problemilla… La cuestión es que tras ver la bonita peli de Big Hero 6, los peques se enamoraron de Baymax (y no es para menos). Viendo lo mucho que les gustaba, decidimos regalarles para Reyes un par de muñecos del súper héroe rojo. Pero a última hora, a punto de pagar, vimos un Spiderman negro que era lo que Toin le había pedido al Rey Mago que le atendió el último día de cole… Así que dejamos un Baymax y compramos el Spiderman.
Se huele el dramón, ¿verdad?
A pesar de que a Toin le encantó su nuevo Spiderman los ojos se le iban detrás de Baymax. Los ojos, primero y la mano después… Gololo protestaba porque Toin quería quitárselo, Toin tiraba al Spiderman y solo quería a Baymax. Y así durante todo el día. Hasta tal punto que papá se planteó el ir al día siguiente a por otro Baymax, la abuela también… Pero yo me negué.
Toin tenía el muñeco que había pedido y esto les servía para compartir y para aprender que hay veces que las cosas no salen como uno quiere.
Pero la frustración es algo innato en nosotros que no podemos evitar, sin embargo debemos enseñar a nuestros peques a manejarla y a aumentar su tolerancia para que de adultos no suponga un problema en su día a día. Así que hoy os dejo con 10 claves para enseñar a tolerar la frustración.
- DA EJEMPLO: Es la clave principal. Ellos imitan nuestros comportamientos. Si perdemos el control con facilidad ellos lo harán también. Si gritamos o golpeamos cosas cuando algo no sale como queremos ellos tomarán esas acciones como «normales» y «válidas».
- DECIR «NO»: Han de acostumbrarse a que no se puede conseguir todo lo que piden o, al menos, no en ese mismo momento. Si aprenden a esperar serán más maduros y tranquilos.
- ENSEÑARLES A ESFORZARSE: A veces les ponemos las cosas demasiado fáciles (haciéndoselas, incluso, nosotros). Han de ser conscientes de que todo se consigue con esfuerzo y perseverancia, aprendiendo de los errores.
- NO DARLES TODO HECHO: Porque si no no cometerán errores, ni equivocaciones. El día que tengan que superar un problema no tendrán armas, puesto que nunca han tenido que solucionar nada por ellos mismos.
- TRABAJAR LA EXPRESIÓN DE LOS SENTIMIENTOS: Debemos hacerles ver que tanto la rabia como la frustración son completamente normales y no hay nada de malo en expresarlos, al contrario, verbalizar un sentimiento les ayuda a no sentirse un «bicho raro».
- NO CEDER ANTE SUS EXPLOSIONES O RABIETAS: Si comprueban que con sus reacciones desmedidas no consiguen ningún cambio en tu actitud, éstas irán disminuyendo poco a poco.
- BUSCAR OTRAS OPCIONES: Si ante un problema les enseñamos a pensar en posibles soluciones, estaremos haciéndoles un gran regalo, les daremos un arma muy importante como es el poder adaptarse a los cambios.
- ENSEÑARLES A PEDIR AYUDA: A veces intentan algo varias veces y no lo consiguen; sin embargo, no piden ayuda, prefieren gritar, tirar lo que tienen entre manos a pedirle a un adulto que les ayude a conseguirlo. Hay que hacerles ver que estamos aquí para ayudarles (no para solucionárselo todo).
- NO MENOSPRECIAR SUS PROBLEMAS: Desde nuestra perspectiva adulta la mayoría de los problemas, o situaciones frustrantes de los niños, nos parecen nimiedades; pero es importante empatizar con ellos.
- VALORAR SUS LOGROS: Siempre que consigan dominar una situación debemos reforzar positivamente su actitud. Esto les hará estar más seguros para continuar con esa misma actitud.
Recuerda lo importante que es tolerar la frustración: nuestros pequeños serán adultos con armas para sortear los obstáculos que, inevitablemente, surgirán a lo largo de su vida.
Y serán más felices.
¿Qué recursos utilizas con tus peques cuando se frustran? ¿Te sirven nuestras recomendaciones? ¡Cuéntanos! 😉
19 Comentarios
Efe 30 y y mamá
01/11/2017 7:18 pmMe ha encantado el post!! No lo había leído antes. Tomo nota ��
Nessa
01/11/2017 10:55 pm¡Me alegra que te haya gustado! Un beso!
Vanesa Pérez Padilla
07/08/2015 6:02 amMe ha gustado mucho cómo habéis planteado este post y estoy contenta porque yo trato de acer exactamente lo que planteáis, más o menos. Y es cierto que el carácter del niño es determinante. Los míos tienen muchísimo, pero mucho. Muy cabezotas y temperamentales así que los dramones toman cuerpo de tragedias griegas como poco. Hay que tener la paciencia de un santo pero es verdad que al final, bien llevados, las cosas se encauzan.
Reitero, me ha gustado mucho y las ilustraciones no sé de quiñen serán pero muy chulas. UN beso muy fuerte!!
Nessa
08/08/2015 9:15 pmGracias, guapa! Me alegra especialmente que te guste este post, ya que como psicóloga entiendes del tema. Las ilustraciones son de banco de imágenes gratuitas, jejejejeje. Un besazo!
Lai PV
26/01/2015 4:10 pmbuen post y buenos puntos para tener en cuenta 🙂
Nessa
26/01/2015 9:49 pmMuchas gracias! Me alegro de q puedan servirte 😉
Katy De orugas y mariposas
25/01/2015 8:14 pmTe felicito por no ceder de buenas a primeras en comprarle el juguete que quería, a veces las soluciones más rápidas a corto plazo, no son las mejores a largo plazo, un beso y buenas recomendaciones!
Nessa
25/01/2015 8:25 pmMuchas gracias, Katy. La verdad es que a veces tendemos a solucionar las cosas en el momento poniéndoles un parche y, como bien dices, luego a largo plazo… El parche se cae! Me alegra que te haya gustado la entrada! Un besote!
Anónimo
20/01/2015 10:27 pmMe pongo a practicar la uno ya
Azu
Nessa
20/01/2015 10:56 pmEs la más importante! 🙂
Sonia Esser
20/01/2015 7:57 pmUn post muy interesante… ¡Aunque no me gustan ni la número dos ni la seis! Porque si no cedéis a nuestras rabietas y nos decís no… tenemos la guerra perdida jajajaja…
¡Un muackiles!
Nessa
20/01/2015 9:56 pmJajajaja! Claro que no mola, pero os hará ser adultos más felices ;). Un besote
Mamá Tijeras
20/01/2015 5:57 pmBonito post, me ha gustado mucho, me lo apunto para lo que tenga que venir, un beso
Nessa
20/01/2015 9:55 pmGracias guapa! Un besote!
Anónimo
20/01/2015 3:29 pmGenial, me viene de maravilla. Vikingo aún no razona mucho, pero estamos comenzando a intentar ayudarlo a que controle su frustración, que es mucha y con ataques repentinos de "me cargo media casa porque no me das lo que pido". Es duro, pero estoy contigo en que hay que enseñarlos a que ciertos sentimientos son normales y que se pueden expresar de otra manera. Me apunto todos tus consejos. Un besazo guapa!
Nessa
20/01/2015 4:25 pmSí, pasan una edad de mucha ira cuando no lo logran, Toin se va relajando, pero le daba x patalear todo lo que pillaba… Y eso no se les puede dejar pasar como si nada… Han de ver que es normal que se enfaden, pero que si lo vuelven a intentar quizá el resultado sea mucho mejor y si no lo es han de expresarlo de otro modo. Un besote!
Eulàlia Carbonell
20/01/2015 2:59 pmUn post estupendo, me lo apunto y estudio que en nada me veo ahí… Muchas gracias guapa. La verdad es que cuesta hacerles entender que las cosas no pueden ser siempre como y cuando ellos quieren…
Nessa
20/01/2015 4:23 pm¡Uf! Sí que cuesta, aunque también depende del carácter del niño o la niña, pero vamos, que es un sentimiento normal que tenemos que enseñarles a canalizar. Espero que te sirva en un futuro! Un besote!
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