Excursiones con niños: El Parque de La Vida.

En Valdés, cerca de la maravillosa Luarca (Asturias), podemos encontrar el Parque de La Vida.

«A lo largo de un recorrido de casi dos kilómetros por un entorno privilegiado, entre arbolado autóctono, conoceremos cómo se creó la tierra y posteriormente la vida, para comprender la fascinante historia de la evolución geológica y biológica desde aquellos tiempos hasta nuestros días.»


Llegamos a la visita guiada de las 12 de la mañana (os la recomendamos, aunque puede visitarse por libre mediante audioguías) y aprendimos muchísimo, tanto los niños como los adultos, durante las dos horas que duró.
La visita está dividida en varias partes:

  • SENDA GEOLÓGICA durante la cual conoceremos en qué condiciones se encontraba nuestro planeta hace millones de años y cómo se fueron formando los continentes, la vida y cómo aún hoy en día la Tierra sigue modificándose. Podremos ver fósiles marinos, terrestres, trozos de meteoritos, minerales…etc.
  • CONSUMO SOSTENIBLE. Nos enseñan trucos para reducir el consumo, la importancia del reciclaje…
  • SENDA BIOLÓGICA durante la cual y a través de esculturas representativas nos cuentan el comienzo de la vida desde los organismo unicelulares hasta los más complejos. La creación de los océanos, la importancia de la Luna en las mareas, la aparición de los primeros homínidos, el ADN… etc.
  • ESTUDIO DEL ESPACIO. Para los niños (y sobre todo si lo han estudiado durante el curso, como en el caso de Gololo, que tenía «fresquitos» algunos conocimientos) es la segunda cosa más impresionante de este parque (¡lo bueno viene luego!). Veremos representaciones a escala del Apolo XI y el Ariane V así como del telescopio espacial Hubble o el Sputnik a tamaño real, como también de los planetas del Sistema Solar. Se podrá visitar el Planetario Digital situado en el centro del parque y con capacidad para unas cien personas y que merece muchísimo la pena.

 

  • FAUNA Y MANEJO DE SERPIENTES. Durante la visita nos van mostrando los distintos animales que habitan este precioso lugar. La mayoría de ellos abandonados por gente que, tras comprobar que ya no son tan «monos», se deshacen de ellos sin más miramientos. Podemos encontrar aves, gatos, conejos, mapaches… ¡Hasta un par de cerdos vietnamitas! Finalmente podremos tener entre nuestras manos varias especies de serpientes (si quieres tocarlas, claro) para quitarnos el miedo y no verlas como la mayoría de la gente las ve. Personalmente, que siempre me han gustado estos reptiles (tanto como los he respetado), esta ocasión de poder tenerlas enredándose entre mis dedos y brazos fue un regalo. Gololo se animó a tocarla al ver que ni a papá ni a mamá nos daban reparo. Toin se mostró más reacio.

 

 


Con la desaparición del Museo del Calamar Gigante de Luarca algunos de los especímenes que allí se conservaban han sido llevados al Parque de la Vida, donde pudimos ver varios de ellos.



Para terminar, comentaros que se puede colaborar con el Parque de la Vida mediante donaciones a través de su web y que estas ayudas son fundamentales para que se siga conservando y que nosotros, los turistas, disfrutemos de estos espacios y que ellos, los animales (los más indefensos) tengan un lugar donde recuperarse cuando el humano se comporta con ellos de esa forma tan deshumanizada.

2 Comentarios

  • Anónimo
    18/09/2014 4:54 pm

    ¡Me encanta! Visitáis unos lugares chulísimo, divertidos y educativos para los peques. ¿me lo apunto! un abrazo.

    • Nessa
      18/09/2014 8:40 pm

      Gracias, Laura! Creo que fue de los sitios en los que más disfrutaron, sobre todo la impresión de tener tan cerca y poder acariciar a una serpiente! Besotes!

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